Una nueva era para los ríos
En todo Estados Unidos, un aumento de la financiación federal para infraestructuras está revitalizando los esfuerzos por eliminar las represas antiguas y a menudo deterioradas. Esta tendencia tiene como objetivo devolver los ríos a su estado natural, impulsar la biodiversidad, mejorar la calidad del agua y aumentar la protección contra las inundaciones ante tormentas cada vez más severas.
Miles de millones para la eliminación y restauración de represas
El proyecto de ley bipartidista de infraestructura ha asignado más de 2.000 millones de dólares a agencias federales, entre ellas el Servicio de Pesca y Vida Silvestre de Estados Unidos, la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica y la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias, para proyectos relacionados con represas. Esto incluye:
- Mantenimiento y reparación de presas
- Eliminación de presas y otras barreras
- Abordar las alcantarillas que impiden el paso de los peces
Ya se han invertido 920 millones de dólares en 544 proyectos en todo el país. Solo el Servicio de Pesca y Vida Silvestre de Estados Unidos recibirá 200 millones de dólares en cinco años para iniciativas de eliminación de represas.
Los estados se suman al esfuerzo
Los gobiernos estatales también están contribuyendo a los proyectos de eliminación de represas. Carolina del Norte, que tiene una gran cantidad de represas en mal estado, ha dedicado $7,2 millones a eliminar varias represas, incluida la represa Shulls Mill. Michigan ha asignado más de $43 millones para el mantenimiento y la eliminación de represas luego de una devastadora falla de una represa en 2020.
Beneficios para la vida acuática y los ecosistemas
La eliminación de represas ofrece importantes beneficios para las especies acuáticas, en particular para los peces migratorios, como la trucha y el salmón. Los estudios demuestran que la eliminación de represas puede:
- Temperaturas del agua más bajas
- Aumentar los niveles de oxígeno disuelto
- Aumentar las poblaciones de peces
- Mejorar el hábitat de los mejillones de agua dulce y las anguilas americanas
Presas grandes y pequeñas en la mira
Si bien se están eliminando algunos sistemas de represas de gran tamaño, como las del río Klamath en California, la mayoría de los proyectos se centran en estructuras más pequeñas. En Maine, la eliminación de la represa Remnant Mill ayudará al arenque de río y al salmón del Atlántico en peligro de extinción. En New Hampshire, la eliminación de la represa Washburn Mill restaurará el hábitat de la trucha de arroyo.
Equilibrio entre beneficios y preocupaciones ecológicas
Aunque la eliminación de las represas cuenta con un amplio respaldo por sus beneficios ecológicos, algunos legisladores republicanos en el oeste del país, en particular, expresan preocupación por la pérdida de embalses, las posibles pérdidas de empleos en el sector hidroeléctrico y el impacto en las fuentes de agua de los agricultores. Argumentan que otros factores, como la sobrepesca y la contaminación, también contribuyen a la disminución de las poblaciones de peces.
Casos de éxito y perspectivas de futuro
A pesar de estas preocupaciones, los proyectos de eliminación de represas están mostrando resultados prometedores. En Carolina del Norte, la eliminación de represas a lo largo del río Watauga ya ha permitido que el agua esté más limpia y que aumente la actividad de los peces. Se espera que la eliminación de la represa Shulls Mill mejore el hábitat de la salamandra gigante oriental, en peligro de extinción.
El reciente aumento de la financiación para la eliminación de represas representa un paso importante hacia la restauración de los ecosistemas fluviales en todo el país. Si bien aún quedan desafíos y debates, el enfoque en mejorar la conectividad acuática y la biodiversidad está allanando el camino hacia un futuro más saludable y resiliente para nuestros ríos y las especies que dependen de ellos.